ESFERA CULTURAL

GABO,

SIEMPRE PRESENTE

El décimo aniversario del fallecimiento de Gabriel García Márquez no sólo traerá eventos a ambos lados del Atlántico, sino la publicación de En agosto nos vemos.

Según Carlos Fuentes Cien Años de Soledad es la obra germen del realismo mágico.
JULIÁN DÍEZ

Las flores amarillas, que siempre acompañaban a Gabriel García Márquez por cábala y estética, volverán a lucir en su recuerdo por distintos rincones de América y España en los próximos meses. Se cumple el décimo aniversario del fallecimiento del premio Nobel colombiano, el 17 de abril de 2014, y además de los eventos de conmemoración habrá otro de relevancia actual: la publicación de su última novela (inédita): titulada En agosto nos vemos.

 


LA FERIA DEL LIBRO DE MADRID ACOGERÁ ESTA PRIMAVERA ACTOS ESPECIALES SOBRE EL AUTOR


 

Su última obra

Presentada por la editorial Random House como el gran hito literario de este ejercicio, se trata de una obra que se conservaba en los archivos personales del autor, y en la que trabajó no menos de diez años. En 2004, por ejemplo, la citó de pasada en una entrevista con el diario El País, asegurando que no se sentía “totalmente satisfecho, aunque sí bastante”, con la forma en que la había terminado. De hecho, algunos capítulos ya fueron publicados como cuentos previamente, en 1999.

Sin embargo, las continuas revisiones a las que el autor era tan aficionado no dieron con una versión definitiva, y las 150 páginas del manuscrito completo fueron recientemente reevaluadas por sus hijos, Rodrigo y Gonzalo García Barcha. Según hicieron público al anunciar la aparición del libro, descubrieron que “el texto tenía muchísimos y muy disfrutables méritos y nada que impida gozar de lo más sobresaliente de la obra de Gabo: su capacidad de invención, la poesía del lenguaje, la narrativa cautivadora, su entendimiento del ser humano y su cariño por sus vivencias y sus desventuras, sobre todo en el amor, posiblemente el tema principal de su obra”.

Por lo que se sabe de En agosto nos vemos, cada capítulo se corresponde con la visita anual de la protagonista, Ana Magdalena Bach, a la isla del Caribe en la que está enterrada su madre. Sin embargo, cada uno de esos viajes supone una ruptura absoluta en su feliz vida de casada, una aventura siempre similar y siempre distinta.

 


GARCÍA MÁRQUEZ TERMINÓ DIEZ AÑOS ANTES DE SU MUERTE LA NOVELA ‘EN AGOSTO NOS VEMOS’


 

Actos conmemorativos

Por otra parte, este décimo aniversario supondrá recuerdos del autor en lugares como las ferias del libro de Bogotá, Nueva York o Madrid, o el “Ransom Center” de la Universidad de Texas, donde se encuentran las veinte cajas de archivos del autor que esa entidad adquirió por dos millones de dólares tras su muerte.

 


EL FESTIVAL «GABO» CONFIRMA SU TRASLADO DEFINITIVO DE MEDELLÍN A BOGOTÁ


 

En particular, como es natural, será Colombia, la tierra natal e inspiración continua del escritor (aunque residiera buena parte de su vida fuera), la que acogerá el mayor número de eventos. Para encabezarlos se encuentra la Fundación Gabo, creada por el propio autor en 1995, entonces con el nombre de Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano. El objetivo original era el de mejorar el nivel del periodismo de su entorno, aunque luego haya expandido sus actividades a la promoción de distintas facetas del arte, la cultura y la ciencia.

Conviene recordar que García Márquez tuvo el periodismo como su primera profesión, si bien el esfuerzo de casi dos años en la creación de Cien años de soledad (1965-66) y su posterior éxito, le hicieron centrarse en la literatura. Muy pronto esa obra se consagró, en palabras de su amigo el escritor mexicano Carlos Fuentes, como “la biblia latinoamericana” y germen del “realismo mágico” que ha sido uno de los más productivos caudales de la literatura en español desde entonces.

La Fundación Gabo ha firmado un convenio con el Ministerio de Cultura de Colombia para las conmemoraciones, en el que también participará la acción exterior del Ministerio de Cultura de España. Según el actual director de la Fundación, Jaime Abelló, “queremos ver cómo su pensamiento -que tiene que ver con la transformación social que siempre añoró para Colombia- también inspira a otros para crear en los diferentes formatos del arte”.

Una nota singular se vivirá en torno al Festival “Gabo”, que, tras celebrarse varios años en Medellín, ha recalado en Bogotá con el compromiso de que permanezca en la capital colombiana a lo largo de varias ediciones. Este año, la undécima edición se desarrollará entre el cinco y el siete de julio.

La deuda del premio Nobel con el español

El idioma español es el cuarto con mayor número de premios Nobel de Literatura, con once galardones. Sin embargo, en todo el siglo XXI sólo ha cosechado uno, el de Mario Vargas Llosa (2010). De hecho, desde el reconocimiento de 1982 a García Márquez sólo se cuenta otro, el de Camilo José Cela en 1989: dos reconocimientos en 41 años para el segundo idioma más hablado del mundo. Ello invita inevitablemente a la especulación: ¿tardará en llegar el siguiente? ¿En quién podría recaer? Durante algún tiempo se citó con frecuencia en las quinielas a Javier Marías, pero falleció en 2012 a los 70 años. Una buena pista sería mirar otros reconocimientos similares, de los que en España se entregan dos: el Premio Cervantes y el Princesa de Asturias. Sin embargo, no hay ningún autor con vida que haya recibido ambos. Si se amplía la búsqueda a otros galardones que suelen augurar el Nobel, sí encontramos un nombre repetido: el de Antonio Muñoz Molina, ganador del Príncipe de Asturias en 2013, el “Jerusalem Prize” y el “Medicis Étranger”. La mexicana Elena Poniatowska y el argentino César Aira (a causa de la deuda contraída por este premio con su país, jamás galardonado pese a las candidaturas repetidas de genios como Jorge Luis Borges o Julio Cortázar) son otros autores mencionados con frecuencia.

La fructífera relación con España

A diferencia de algunas tendencias actuales que parecen abrir brecha entre los países hispanoparlantes a ambos lados del Atlántico, García Márquez siempre guardó un lugar especial en su corazón para España. Y es que nunca olvidó los períodos en que vivió aquí, el más extenso entre 1967 y 1975 en Barcelona. Fueron los años de su salto a la fama internacional tras la publicación de Cien años de soledad, de la escritura de El otoño del patriarca y de la consolidación, a la sombra de la agente Carmen Balcells, del “boom” de la literatura latinoamericana. Por entonces fue cuando le dijo a Carlos Fuentes que “todos estamos escribiendo la misma novelota latinoamericana con un capítulo colombiano mío, un capítulo mexicano tuyo, el argentino de Julio Cortázar, el chileno de Pepe Donoso, el cubano de Alejo Carpentier…”. Aunque luego fijó su domicilio definitivo en Ciudad de México, García Márquez mantuvo un hogar en Barcelona, que visitaba con regularidad hasta su fallecimiento, y reconoció una y otra vez su deuda con la gran tradición de la literatura española.

La novela En agosto nos vemos narra la visita anual de la protagonista a la isla en la que está enterrada su madre.

OTRAS FUENTES

La página web de la Fundación Gabo da cuenta de las últimas novedades, no sólo de su propia actividad, sino también de otros eventos relacionados con la memoria del autor colombiano. Fundaciongabo.org

La escritura de Cien años de soledad tiene una cautivadora historia en sí misma.

Un relato detallado de los años de García Márquez en Barcelona.