ALDEA GLOBAL

Freno al «salvaje oeste» digital en la UE

El Parlamento Europeo aprobó el 5 de julio las leyes de mercados digitales y de servicios digitales con normas claras que regulan su funcionamiento.

La expresión es del diputado europeo danés Christel Schaldemose, ponente de la Ley de Servicios Digitales, para quien «el mundo digital se ha convertido en el “salvaje oeste”, en el que los más grandes y fuertes fijan las reglas. Pero ha llegado a la ciudad un nuevo sheriff». Este nuevo defensor son la Ley de Mercados Digitales y la ya citada de Servicios Digitales, cuyo visto bueno dio el Parlamento Europeo, previa aprobación por la Comisión. Un reto para las grandes plataformas y una indudable ayuda para los usuarios.

MELCHOR DEL VALLE,

El Parlamento Europeo (PE) aprobó el 5 de julio de 2022, por amplia mayoría, la Ley de Mercados Digitales (DMA, de Digital Markets Act) y la Ley de Servicios Digitales (DSA, de Digital Services Act), que ya habían sido consensuadas entre el propio PE y el Consejo Europeo. Según la nota de prensa emitida por el organismo comunitario, «ambas leyes tienen por objeto abordar los efectos sociales y económicos del sector tecnológico. A tal fin, establecen normas claras que regulan, de acuerdo con los derechos y valores de la UE, el funcionamiento y la prestación de servicios por parte de estas empresas en la Unión».

Qué hace el ‘sheriff’. Cabe decir que los Estados miembros de la Unión dan un paso tan gigantesco como histórico para lograr la regulación legal del mercado digital. «Reglas sin precedentes», dicen desde el PE, para que las empresas tecnológicas rindan cuentas. No olviden esto último, en lo que incidiremos un poco más adelante, porque esos controles son el principal objetivo de ambas normas. La DSA, si vemos las normativas por separado, «establece obligaciones claras para los proveedores de servicios digitales, como las redes sociales o los mercados electrónicos, para hacer frente a fenómenos que pueden suponer una amenaza para la sociedad, como la difusión de contenidos ilegales y la desinformación en línea. Los nuevos requisitos son proporcionales al tamaño de las plataformas digitales y a los riesgos que representan para la ciudadanía», dice el PE.

 


SON UNAS «REGLAS SIN PRECEDENTES», DICEN DESDE EL PARLAMENTO EUROPEO, PARA QUE LAS EMPRESAS TECNOLÓGICAS RINDAN CUENTAS


 

La DMA «establece obligaciones para las grandes plataformas en línea que ejercen como guardianes de acceso (es decir, aquellas plataformas cuya posición dominante aboca a prácticamente todos los usuarios a utilizarlas) en el mercado digital para velar por un entorno empresarial más justo y una mayor oferta de servicios para los consumidores». Aunque lo habrán percibido entre líneas, hablar de «guardianes de acceso» es citar implícitamente a las llamadas GAFAM: Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft (aunque sería mejor llamarlas GAMAM desde que Facebook es Metaverso). Y no: la denominación no es un invento del redactor de la ley, porque a estas grandes compañías las llaman, en argot del sector, «los guardianes» (gatekeepers) online.

Servicios y Mercados. La DSA, pues, está más basada en las redes sociales y el comercio electrónico (e-commerce) y busca frenar la desinformación y los bulos o fake news, además del uso publicitario de datos confidenciales o de menores. La transparencia y las explicaciones sobre el uso de sus algoritmos son los objetivos en el caso de las redes sociales; y el rigor respecto a la trazabilidad y la seguridad de los productos ofertados, si hablamos del comercio electrónico. También destaca, decíamos, la prohibición de diversos tipos de publicidad selectiva, como son los anuncios basados en datos confidenciales y aquellos dirigidos a menores de edad. En el capítulo multas se prevé hasta el 6% de su facturación anual para quien incumpla las nuevas obligaciones impuestas.

Para la DMA lo importante es evitar el control de los «guardianes» sobre los datos de los ciudadanos de la UE. Simplificando, se buscará evitar monopolios y se diseñarán normas de acceso a las plataformas de dichos guardianes. En otras palabras, sus servicios de comunicación tendrán que ser interoperables, pero es que, además, los usuarios corporativos (empresas) podrán tener acceso a la información de las grandes plataformas para poder publicitar sus productos y servicios en estas, aunque sean competencia. Afecta a las GAFAM y alguna más, como YouTube, WhatsApp, Instagram, TikTok, Telegram o Twitter, porque la DMA se aplica a las plataformas que superen los 45 millones de usuarios, entre otros requisitos, lo que las situará bajo el control directo de la Comisión Europea. Las sanciones aquí pueden llegar al 20% de la facturación para los reincidentes.

Reacciones. Al cierre de este número de Escritura Pública apenas había reacciones de las grandes plataformas. Únicamente Apple y Google. La primera, que ya estaba abiertamente en contra de la DMA, ha hecho público su desacuerdo indicando que la norma va a crear vulnerabilidades en la privacidad y la seguridad de sus usuarios, aunque lo que más les duele es que creen que no van a poder cobrar por determinados derechos de propiedad intelectual. Con esta última idea están en Google, aunque ellos lo expresan diciendo que van a salir perdiendo los consumidores europeos porque no van a poder disponer de sus innovaciones y, por tanto, se reducirá su oferta de servicios.

 


LA LEY DE SERVICIOS DIGITALES BUSCA FRENAR LA DESINFORMACIÓN Y LOS BULOS O FAKE NEWS, ADEMÁS DEL USO PUBLICITARIO DE DATOS CONFIDENCIALES O DE MENORES


 

En el lado opuesto tenemos organizaciones como la GSMA (Global System for Mobile Communications, organizadores –ente otras actividades– del MWC Barcelona), que se auto define como «una organización global que unifica el ecosistema móvil para descubrir, desarrollar y ofrecer innovación fundamental para entornos empresariales positivos y cambios sociales»; y la ETNO (European Telecommunications Network Operators’ Association), que de sí misma dice que es «la voz de los operadores de redes de telecomunicaciones de Europa desde 1992 y se ha convertido en el principal grupo político para los operadores europeos de redes de comunicaciones electrónicas». Ambas se han posicionado sin fisuras a favor de la frase estrella del PE: «lo que es ilegal offline debería ser ilegal online». Para que conste, son organizaciones nacidas en Europa y paneuropeas en sí mismas, aunque con intereses en todo el mundo; sobre todo GSMA.

Y ahora, ¿qué? Los textos se tienen que publicar en el Diario Oficial de la UE, lo cual sucederá cuando el Consejo los apruebe oficialmente (unos días después de la aprobación por el PE para DMA y en septiembre de 2022 para la DSA). Su entrada en vigor será veinte días después de su publicación; y serán directamente aplicables a los seis meses para la DMA y a los quince meses o en enero de 2024 (la fecha más tardía) para la DSA. Esto se aplica a toda la Unión Europea sin necesidad de que los Estados miembros las transpongan.

Procede finalizar con una declaración del alemán Andreas Schwab, ponente de la DMA: «Ya no vale lo de la “supervivencia del más fuerte”. El objetivo del mercado único digital es que Europa reciba a las mejores compañías y no sólo a las más grandes. Por eso debemos centrarnos en la aplicación de la legislación. Hace falta una vigilancia adecuada para asegurar que el diálogo regulatorio funciona. Sólo una vez que tengamos un diálogo entre iguales lograremos que la UE sea respetada; se lo debemos a nuestros ciudadanos y empresas».

Modificación de la carga de la prueba

En palabras del europarlamentario alemán Andreas Schwab, ponente principal de la Ley de Mercados Digitales, «esta legislación [DMA] modifica la carga de la prueba, porque serán las compañías las que tendrán que demostrar que su conducta es leal y no los reguladores, que hasta ahora necesitaban demostrar que se habían vulnerado las leyes antitrust vigentes».

Es algo similar a lo que sucede con la normativa española para la Defensa de Consumidores y Usuarios, que textualmente dice: «Los prestadores de servicios serán responsables de los daños y perjuicios causados a los consumidores y usuarios, salvo que prueben que han cumplido las exigencias y requisitos reglamentariamente establecidos». En el caso de la DMA, se facilita el trabajo de control y de imposición de sanciones por parte de organismos como la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea.

Mayoría europea

La Ley de Mercados Digitales (DMA) y la Ley de Servicios Digitales (DSA) salieron adelante en el Parlamento Europeo, el 5 de julio de 2022, con amplias mayorías. En concreto, la DMA obtuvo 588 votos a favor, 11 votos en contra y 31 abstenciones, mientras que la DSA se aprobó con 539 votos a favor, 54 votos en contra y 30 abstenciones.

Algunas enmiendas a la DSA, que no salieron adelante, estuvieron muy presentes en los debates, como la que buscaba que los medios de comunicación estuviesen excluidos de las leyes, con lo que se habría impedido a las plataformas recusar los contenidos generados por los medios. La Federación de Periodistas Europeos se opuso a esa enmienda, pero insistió en obtener «garantías que evitarían que las plataformas de internet eliminen arbitraria y unilateralmente el contenido periodístico».

Pantallazos de las votaciones en el Parlamento Europeo.

Por si las dudas

Sneak peek: how the Commission will enforce the DSA & DMA. Thierry Breton, comisario europeo para el Mercado Interior. (Publicado en LinkedIn).

Avanzando en la soberanía digital europea: los reglamentos DSA y DMA. Moisés Barrio Andrés. Real Instituto Elcano (2022).
Para el Parlamento Europeo los nuevos requisitos son proporcionales al tamaño de las plataformas digitales y a los riesgos que representan para la ciudadanía.